domingo, 1 de diciembre de 2013

Expandiendo

Las palabras son limitaciones porque dan forma a lo que muchas veces no tiene. Así, al mencionar a dios, estamos limitando dentro de una palabra lo que significa para nosotros ese dios. Y cada uno tiene un concepto de dios diferente, porque metemos dentro de esa palabra nuestra creencia. Así que cada uno hace de su dios algo límitado, pequeño y mutilado. Limitamos al amor en una palabra, cuando mencionamos "todo el amor del mundo", solo hacemos referencia a nuestra limitada forma de sentir amor.

Y todo lo que vemos y nombramos también lo limitamos. Al nombrar "árbol" lo limitamos a una cosa con raíces, tronco y copa, que algunas veces da frutos. Pero nos perdemos en la forma, en lo que conocemos del árbol y nos olvidamos frecuentemente que detrás de la forma está lo informe que le da vida a esa materia, que el árbol existe como expresión divina y está completamente integrado y dependiendo de un todo, todo esta perfectamente equilibrado e interrelacionado, la existencia de ese árbol depende por completo de todo, no es un hecho aislado.
Con la conciencia de esto, nos hacemos responsables y respetuosos, sabiendo que nuestros propios cuerpos están alimentándose y viviendo dentro de esos elementos, que dependemos por completo del buen funcionamenta de esa naturaleza y nos hacemos parte de ella ya no viendo un árbol, sino viendo una parte de nosotros, que cuidamos y mimamos como si fuera nuestro propio corazón.

No hay comentarios:

Publicar un comentario