domingo, 11 de agosto de 2013

Sobre el amor y la verdad

Antes creía que el amor era construcción, unión. Hoy comprendo que no poseo la verdad, pues la verdad no es un objeto, nadie te la puede dar, ni te la puede crear, solo tú puedes descubrirla en tu ser, mas allá de toda creencia y pensamiento. Solo se puede ser parte de la verdad. El amor es una palabra y esa palabra la adaptamos a lo que nos gustaría que fuera el amor. Realmente, conocemos solo una parte del amor. El Amor, ese en mayúsculas queda lejos de nuestra comprensión.Yo no estoy hablando del amor en minúsculas, ese que conocemos como humanos. Eso que nosotros llamamos amor, es parte de un egoísmo. Te quiero, siempre que hagas esto y lo otro. Te quiero, porque eres mi padre. Nuestro amor, siempre necesita un motivo para amar, por eso puede pasar del amor al odio. En el momento que tú "me falles" te odiaré.Pero aun así, hay muestras humanas del que el amor puede ser destrucción. Por un profundo amor hacia ti, el médico puede amputarte una pierna gangrenosa. Por un profundo amor, Jesús puede destruir el puesto de mercaderes ¿nunca has destruido algo para mejorarlo?¿cómo harías un mueble de madera sin destruir un árbol? El Amor en mayúsculas, no se basa en nuestros valores. Nosotros funcionamos en base a la dualidad, por tanto, tenemos diferenciado bien y mal. Para nosotros, amor y odio son dos cosas diferentes, como construcción y destrucción, son antagónicos. Pero de donde surge, no está diferenciado, es exactamente la misma energía. Los opuestos son todos complementarios.El uno nace de la existencia del otro. La belleza de las cosas, solo la vemos, porque existe la fealdad. Todo lo que usamos, previamente ha pasado por una destrucción. Nada se crea ni se destruye, solo se trasforma. Para construir, necesitas previamente algo que puedes transformar, por lo tanto, destruir su imagen inicial. Esa es una parte de la alquimia. El plomo debe morir como plomo para ser oro. La semilla debe morir como semilla para ser árbol. El árbol nace de la semilla, pero la semilla debe destruir su forma, si quiere ser semilla no podrá ser árbol. El amor destruye formas, el mismo amor que creó la semilla, la destruye. Estamos hablando dentro del mundo de la forma. Eso es lo único que vemos con nuestros ojos. Las cosas no son bellas o feas, las "vemos" bellas o feas, es nuestro valor. El amor no es solo besar y apapachar, el amor puede ser muy cruel. Porque te quiero mucho y no quiero ver que sufras, te puedo practicar la eutanasia que tu me pides a gritos, porque te quiero. Pero la verdad no es un pensamiento, pues un pensamiento lo puedes (afortunadamente) cambiar. Entonces la verdad "absoluta" sería una cosa variable. El sentimiento también.Quitemos pues nuestros pensamientos, lo que creo, lo que creo que se, lo que creo que siento, y observemos el mundo sin valores preconcebidos. La verdad no se puede explicar ni razonar, pues en ese momento ya la estas encasillando, solo se puede observar, descubrir y ser parte de ella.

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